Actualmente tenemos la idea de que los algoritmos de los buscadores están pensados para burlar cualquier esfuerzo de diseñar un sitio atractivo. Ya hemos venido leyendo artículo tras artículo de porqué a los buscadores no les gustan las imágenes, vídeos, applets y otros elementos parecidos a estos y al final suponemos que tampoco le gustan las URLs dinámicas.

Tomando en cuenta esto, pero también que el usuario no se siente nada atraído por direcciones como: http://dominio.com/nroduct.Dhp?cid=1&pid=5, que nada dice de que contiene o no la página en cuestión, nos lleva a poner a un lado los algoritmos y fijarnos en qué le gusta a los usuarios ya que son ellos quienes nos leen.

Por ende, una URL dinámica ánima y mantiene al usuario al corriente de sus movimientos en el portal, por eso es importante mantener éste método siempre disponible, es decir, que se vaya actualizando mientras el lector llena algún formulario o se mueve de una página a otra. En cierto modo no existen estas páginas para los motores de búsqueda, por lo que se indexan a la web a través de la exploración.

Inclusive si una página con URL dinámico se ha generado previamente por un usuario y se ha almacenado en el servidor, los motores de búsqueda podrían rebotar si estos contienen demasiados signos de interrogación y otros símbolos especiales.

Anteriormente los motores de búsqueda no indexaban las páginas dinámicas, ahora lo hacen pero a un ritmo más lento al de una URL estática. La solución no es volver al HTML estático, si no mejorar los formatos de los motores y así los usuarios puedan manejar mejor la búsqueda

Una solución también favorables es la reescritura del URL, ya contamos con herramientas especiales que se adaptan a la plataforma y al servidor, volviendo el URL en un formato de fácil lectura y haciendo que aparezcan ante el navegador como páginas HTML normales.